Aunque nací en 1708 como esclavo en las colonias británicas mi vida como humano no fue distinta a cualquiera de los demás esclavos, tan sólo añadiré un dato importante para mí.
Aprendí a leer y escribir porque mis amos querían que lo hiciera para poder leerles a sus hijos mientras ellos se iban a fiestas. A parte de este hecho mi vida de esclavo no era distinta.
En el año 1738 enfermé y mis amos no se preocuparon por mí, tan sólo se preocupó un hombre blanco que era médico. Sólo venía por las noches a cuidar de mí y les dejaba instrucciones a las mujeres para que me cuidaran mientras él no estuviese.
Una noche no tenía más fuerzas para seguir viviendo y le pedí que me matase, le veía como un ángel, él me contestó:
-Te voy a dar algo mejor que la muerte, Laurent. Te daré la vida eterna.
En ese momento me mordió en el cuello y bebió mi sangre, luego lo que recuerdo es despertarme entre sudores y a oscuras 3 días más tarde. Supuse que estaban durmiendo pero pude ver que estaba en una caja de madera y olí la tierra a mi alrededor entonces grité, mi voz sonaba distinta.
Nadie me contestó y empecé a abrirme paso entre la madera y la tierra, estaba impresionado con la fuerza que tenía, al salir me encontré con el médico que me dijo:
-¡Has despertado al fin!
-¿Qué soy?
-Eres un vampiro, un Asanbosam pero sin garras en vez de los pies. Como te dije hace tres días te iba a dar la vida eterna.
No lo comprendí y debió de ver mi confusión, se acercó a mí y añadió:
-Tu amo no quiso que yo te curase y celebró tu muerte con una suntuosa fiesta, ahora te puedes vengar por todo lo que te hizo.
Es lo que hice, fui a casa de mi amo que al verme creyó ver un fantasma y le maté junto a toda su familia. Luego quemé la casa y me marché lejos de allí, hacia el oeste que todavía estaba inexplorado.
No me volví a encontrar con el que me hizo y ni quiero porque estoy feliz así.
Años más tarde supe que se fundaban los Estado Unidos, no me importaba la verdad porque todavía los negros eran esclavos de los blancos y estos de los británicos.
Pero con la guerra de Independencia puede luchar contra los ingleses porque creía que podía cambiar las cosas para todos, fui un ingenuo en ese caso. Juré que no volvería a serlo más.
Voy a describirla con un poco más de detalles
La Guerra de Independencia de los Estados Unidos fue un conflicto que enfrentó a las trece colonias británicas originales en América del Norte contra el reino de Gran Bretaña. Ocurrió entre 1775 y 1783, finalizando en la batalla de Yorktown y la firma del Tratado de París.
Durante la guerra, Francia ayudó a los revolucionarios estadounidenses con tropas comandadas por Marqués de La Fayette, mientras que España lo hizo desde el principio gracias a Bernardo de Gálvez y de forma abierta a partir de la batalla de Saratoga, mediante armas, suministros y abriendo un frente en el flanco sur.
Las colonias británicas que se independizaron de Gran Bretaña edificaron el primer sistema político liberal y democrático, alumbrando una nueva nación, los Estados Unidos de América, incorporando las nuevas ideas revolucionarias que propugnaban la igualdad y la libertad. Esta sociedad colonial se formó a partir de oleadas de colonos inmigrados, y no existían en ella los rasgos característicos del rígido sistema estamental europeo.
En las colonias del sur (Virginia, Carolina del Norte, Carolina del Sur y Georgia) se había organizado un sistema esclavista, con unos 500.000 esclavos negros, que explotaban plantaciones de tabaco, algodón y azúcar. De este modo, la población estaba compuesta por grandes y pequeños propietarios y esclavos.
Por supuesto yo no me quedé mucho tiempo en estos estados porque iban en contra lo que pensaba.
Los antecedentes a la Guerra de la Independencia de los Estados Unidos se remontan a la confrontación franco-británica en Norteamérica y a las consecuencias de la Guerra de los Siete Años.
La Guerra de los Siete Años terminó en 1763. El 10 de Febrero, el Tratado de París ponía fin al imperio colonial francés en América del Norte y consolidaba a Inglaterra como la potencia hegemónica. En oposición sólo tenía a España, que controlaba Nueva Orleans, la ciudad más importante. Respecto a Francia, la pérdida territorial no fue sentida como algo catastrófico. Se conservaban los derechos pesqueros en Terranova y la población católica francófona recibiría un trato de respeto. Por otro lado en el Caribe las pérdidas pueden ser compensadas pues la colonia principal francesa del Caribe, Puerto Príncipe (la Española), produce la mitad del azúcar consumido en todo el mundo, y su comercio con África y las Antillas está en pleno apogeo.
Respecto a los colonos estadounidenses, la guerra modificó radicalmente el panorama anterior. Los francófonos católicos de Quebec, tradicionales enemigos de los colonos estadounidenses de las Trece colonias recibieron un trato respetuoso por parte de las autoridades británicas. Trato que se confirmara en 1774 cuando se dotó a Canadá de un estatuto particular dentro de las colonias estadounidenses, llevándose sus fronteras hasta la confluencia del Ohio y el Misisipi. Asimismo su población conserva un derecho civil propio y la Iglesia Católica es reconocida. Todos estos movimientos fueron mal aceptados por la población de las Trece colonias.
La causa inmediata de este conflicto fue el injusto trato que Gran Bretaña infligía a los colonos, pues éstos aportaban riquezas e impuestos a la metrópoli pero no tenían los medios para decidir sobre dichos impuestos, por lo que se sentían marginados y no representados.
Ahora voy a describir la Guerra Civil estadounidense en la cuál también participé en el bando abolicionista
Las tensiones entre estados pro-esclavistas y los abolicionistas, junto al aumento de los desacuerdos en la relación entre el gobierno federal y los estatales provocaron conflictos violentos en la expansión de la esclavitud en los nuevos estados. Abraham Lincoln un gran abolicionista fue elegido presidente en 1860, aunque yo esperaba que algún día llegase un negro al poder de este gran país.
Antes de que tomase posesión de su cargo, los siete estados esclavistas declararon su secesión de los Estados Unidos, formando los Estados Confederados de América.
El gobierno federal arguyó que la secesión era ilegal, y pronto se produjo el ataque por parte de los secesionistas a Fort Sumter, y así se inició la guerra.
Tras la victoria de la Unión en 1865, se añadieron tres enmiendas a la constitución para garantizar la libertad de los casi cuatro millones de afroamericanos que habían sido esclavos, convirtiéndolos en ciudadanos y dándoles el derecho de voto, por fin estaba en un bando que tenía mis mismas aspiraciones. La guerra y su resolución dieron lugar a un aumento sustancial de las competencias del gobierno federal.
Tras la guerra tuvo lugar el asesinato del Presidente Lincoln, durante la época conocida como la Reconstrucción en la cual se desarrollaron políticas encaminadas a la reintegración y la reconstrucción de los estados sureños garantizando al mismo tiempo los derechos de los nuevos esclavos liberados.
Las controvertidas elecciones presidenciales de 1876 se resolvieron mediante el Compromiso de 1877, por el cual los demócratas sureños reconocieron como presidente a Rutherford B. Hayes a cambio de que éste retirara las tropas que aún permanecían desplegadas en Louisiana, Carolina del Sur y Florida.
A partir de 1876 empiezan a aplicarse las llamadas leyes de Jim Crow, cuya filosofía perduraría hasta 1965 en algunos casos y mediante las cuales se aplicaba la filosofía "iguales pero separados" a la convivencia entre negros y blancos.
En el Norte, la urbanización sin precedentes y una afluencia de inmigrantes aceleró la industrialización del país. La ola de la inmigración, que duró hasta 1929, proporcionó mano de obra para los negocios de los Estados Unidos, transformado a su cultura. Alta protección arancelaria, la creación de infraestructuras nacionales, y los nuevos reglamentos bancarios alentó el crecimiento industrial. En 1867 se produce la compra de Alaska a Rusia, completando la expansión continental del país.
Aunque no tuve nada que ver con lo sucedido en la Masacre de Wounded Knee en 1890 fue el último gran conflicto armado contra los nativos indios americanos, he oído hablar de ello.
En 1893, la monarquía indígena en el Pacífico Reino de Hawái fue derrocado en un golpe de estado liderado por los residentes de América; el archipiélago fue anexado a los Estados Unidos en 1898.
Y tampoco tuve nada que ver con la victoria en la guerra Hispano-Estadounidense ese mismo año, porque yo estuve en la guerra que quería estar en la que los negros tuvieran derecho al voto, se demostró que los Estados Unidos era una potencia mundial y dio lugar a la anexión de Puerto Rico y las Filipinas.
Filipinas accedió a la independencia en 1956; Puerto Rico sigue siendo un estado libre asociado de los Estados Unidos.
Después de 1898, tras la Guerra Hispano-Estadounidense Estados Unidos fue adquiriendo paulatinamente mayor influencia en el mundo.
Luego tuvimos que vivir la 1ª Guerra Mundial, y este hecho nos volvió a unir a mi creador y a mí. Nos tuvimos que contar mucho desde aquella noche de 1738 que nos separamos.
Vi que estaba muy mal y se lo dije a lo que me contestó:
-Acabo de salir de trabajar de un sanatorio mental, un lugar donde mandan a las personas que están locas o creen que están locas. Tengo una paciente que ve el futuro.
-Es muy interesante, pero… ¿Cómo acabaste ahí?
-Porque era médico y me especialicé en ese tipo de enfermedad. Deja que te cuente más cosas de Alice… ¿Sabías que predijo que te volvería a encontrar en este momento del día y antes de que explotase la Gran Guerra?
Negué con la cabeza y me empezó a hablar más de Alice, pero nunca me dio una descripción de ella porque no quería que fuese a por ella.
Tras este encuentro nos volvimos a separar, creo que esta vez para siempre. Al estallar la 1ª Guerra Mundial en 1914, yo me alisté aunque los Estados Unidos se mantuvieron neutrales.
Los estadounidenses se solidarizaron con los británicos y franceses, a pesar de que muchos ciudadanos, sobre todo los originarios de Irlanda y Alemania, se opusieron a la intervención. En 1917 los Estados Unidos se sumaron a los aliados, contribuyendo a la derrota de las potencias centrales.
La gripe española fue una pandemia de gripe de inusitada gravedad, causado por un brote de influenza virus A del subtipo H1N1 que mató entre 50 y 100 millones de personas en todo el mundo entre 1918 y 1919, aunque también influimos los vampiros.
Aunque el Senado era reacio a participar en asuntos europeos no ratifico el Tratado de Versalles que estableció la Sociedad de Naciones. El país aplico una política de unilateralismo que rayaba el aislacionismo.
Aunque en 1920 el movimiento de los derechos de la mujer ganó la aprobación de una enmienda constitucional para otorgar a las mujeres el sufragio. Ese mismo año me encontré con Victoria, una vampira con un don innato para escapar de cualquier situación.
Unos meses más tarde me presentó a James, su pareja desde hace siglos. Olí en él la sangre de mi creador, pero nunca le dije nada y creo que él nunca lo intuyó.
En parte debido a su servicio en la guerra, los americanos nativos obtuvieron la ciudadanía de los Estados Unidos en la Ley de ciudadanía india de 1924. Ese mismo año James me hizo una pregunta que me incomodó un poco pero se la contesté:
-Mi creador murió poco después de que me mordiese, mi pueblo lo mató. ¿Y tú creador?
-Mi creadora tuvo el mismo destino que tu creador, pero en vez de matarlo mi pueblo fui yo. Y junto a ella murieron sus padres.
Durante la mayor parte de la década de 1920, los Estados Unidos gozaban de un período de prosperidad disminuyendo el desequilibrio mientras crecían las ganancias de las granjas industriales.
Un aumento de la deuda y un mercado de valores inflados culminaron en la caída de 1929 que desencadenó la Gran Depresión. Este hecho nos dio muchas oportunidades de matar a los que debían dinero a la mafia, éramos los mejores asesinos que tenían.
Después de su elección como presidente en 1932 Franklin D. Roosevelt respondió con el New Deal, una serie de políticas de aumento de la intervención del gobierno en la economía.
La Dust Bowl de mediados de los años 30 dejo varias comunidades de agricultores empobrecidos y estimulados una nueva ola de migración occidental. Aunque nosotros seguíamos con nuestro negocio de matar a gente para la mafia, nos cansamos así que nos independizamos y nos recorrimos mundo.
Pero la entrada de toda Europa en la 2ª Guerra Mundial nos benefició, pero no queríamos pelear así que nos volvimos a los Estados Unidos oficialmente neutral, se iniciaron el suministro de material a los aliados en marzo de 1941 a través del Programa de Préstamo y Arriendo.
El 7 de Diciembre de 1941 los Estados Unidos se unieron a los Aliados contra las Potencias del Eje después de un ataque japonés a Peral Harbor, la verdad es que sentó bien a la nación ser atacada de esa forma por los japoneses demostrando que no deberíamos creernos los mejores del mundo en nada.
La Segunda Guerra Mundial impulsó la economía mediante el suministro de capital de inversión y puestos de trabajo, mientras que muchas mujeres entraron en el mercado laboral. Entre los principales combatientes, los Estados Unidos es la única nación que se enriqueció a causa de la guerra. Las conferencias en Bretton Woods y Yalta esbozaron un nuevo sistema de las organizaciones internacionales colocando a los Estados Unidos y Unión Soviética en el centro de los asuntos mundiales. Cuando llego el fin de la 2ª Guerra Mundial en Europa, una conferencia internacional 1945 celebrada en San Francisco produjo la Carta de las Naciones Unidas, que entro en vigor después de la guerra.
Los Estados Unidos, después de haber desarrollado la primera de las armas nucleares, la utilizaron en las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki en Agosto. Japón se rindió el 2 de Septiembre, poniendo fin a la guerra.
Los campos de concentración en los Estado Unidos alojaron a unas 120.000 personas, en su mayor parte de etnia japonesa, más de la mitad de las cuales eran ciudadanos estadounidenses, en establecimientos diseñados a ese efecto en el interior del país, durante 1942 y 1948. Estaban bien porque James, Victoria y yo entrábamos allí a buscar presas, siempre creían que eran los guardias.
Estados Unidos participó, esta vez no quise participar aunque sí que estuve por allí cerca con James y Victoria, en la guerra del Vietnam donde finalmente Estados Unidos fue derrotado. Esta guerra es considerada como el hecho más triste de la historia del país.
Para algunos, para mí no porque puede ver cómo un país entero se desmoronó quedando aún más patente que Estados Unidos no era tan bueno como creían.
La influencia estadounidense en aspectos tales como la economía, la ciencia, tecnología y la cultura creció a nuevos niveles. A causa de la guerra fría y el enfrentamiento político, ideológico y social que produjo con los países socialistas, particularmente la Unión Soviética, el papel de los asuntos militares e internacionales creció en la política de esa época.
También en esa época tuvieron lugar eventos importantes, como el Movimiento por Derechos Civiles en los años 50 y 60, y el alunizaje de Apollo XI en 1969. Me pareció una mentira muy ingeniosa.
Con el desplome de la Unión Soviética en 1991 los Estados Unidos pasaron a ser la única superpotencia del mundo.
Pero los atentados del 11 de Septiembre de 2001 quebraron todas esperanzas por un nuevo milenio apacible, y fueron la justificación por la invasión de Afganistán y la guerra contra el terrorismo.
En ambos casos nos pidieron a James, a Victoria y a mí que participásemos como espías pero no quisimos formar parte porque nos divertía más estar de caza que de espionaje.
La amenaza del terrorismo ha llegado a ser una gran fuerza en la política del país, y en 2003 formó en gran parte la justificación junto a la no confirmada posesión de armas nucleares por la invasión de Iraq.
El asunto dominante de la política actual sigue siendo la lucha entre las necesidades por la seguridad nacional y el mantenimiento del espionaje interno en la población a través de la controvertida ley "Patriot Act".
Pero lo que nos interesa son las cazas que hacíamos los nómadas, que en 2008 fuimos al estado de Washington y paramos en Forks.
Como todos sabéis ya la historia de Bella y Edward voy a añadir que ya nos íbamos cuando les oímos jugar así que tuvimos la primera discusión desde que llevábamos juntos. James decidió por él y por Victoria:
-Vamos a ver quiénes son.
-¿Por qué? Déjales que se diviertan como humanos, si al fin y al cabo no querrán que estemos por aquí.
-Vamos amigo Laurent por unas razones que te voy a dar. La primera, siento curiosidad por ellos; y la segunda porque yo soy más antiguo que tú y eres parte de mí grupo.
-De acuerdo James. Te pido sólo una cosa.
-Dime tu petición sin miedo.
-Déjame hablar a mí, tengo un poco más de tacto que tú tratando con este tipo de vampiros.
James accedió y fuimos a ver a los vampiros. Como dijo James eran curiosos, porque tenían los ojos dorados en vez de rojos como los teníamos nosotros. Lo que ninguno supuso era lo que pasaría después de hablar con ellos, que James olería a una humana. ¡Qué olor tan delicioso!
Yo sabía que debía haberle convencido de que no era necesario ir, pero ahora no me puedo arrepentir.
Tras que el que protegía a la humana, es decir Edward y Bella, y los otros dos se fueran con la humana yo decidí abandonar el reducido grupo de James. Estuve hablando con el cabeza de familia de los Cullen, Carlisle, que me dijo:
-Deberías ir a Denali que hay una familia como la nuestra, que sólo se alimenta de animales. Al principio no te gustará pero te acabarás acostumbrando.
-He de advertiros de que James es demasiado sádico, no parará por nada hasta conseguir su objetivo y la mujer… No es muy de fiar, así que tened cuidado con ambos.
-Gracias Laurent, te debemos mucho.
-De eso nada, estamos en paz.
De la que me iba entraba Edward con Bella y le dije lo mismo que a Carlisle, no sé si me hicieron caso o no.
Me fui a Denali con las mujeres vampiras que había allí, se llaman Tania, Katie e Irina. Al llegar allí me recibieron con los brazos abiertos, me costó un poco acostumbrarme a la vida “vegetariana” que tenían pero no tuve muchas opciones.
He de añadir que me enamoré de Irina, que tenía algo muy especial que nunca encontré en ninguna mujer… Ni siquiera mortal, y eso que he conocido a muchas.
Pasaron los meses pero un día que fui de caza solo me abordó un olor muy familiar que no pertenecía a ninguna de las mujeres con las que vivía.
De entre las sombras apareció Victoria que me dijo con una media sonrisa en la cara:
-Veo que te tratan muy bien traidor, espero que no te moleste que te haya venido a visitar.
-Por supuesto que no Victoria, por favor acompáñame hasta mi nueva casa y me cuentas todo lo que me tengas que contar.
Accedió a mi petición y me siguió hasta la casa de Tania, que al verla las hermanas se pusieron en alerta a lo que dije:
-Tranquilas por favor. Es una amiga que me ha venido a visitar y a ponerme al día con noticias.
Se relajaron un poco pero no quisieron quitarle en ningún momento el ojo de encima. Le indiqué una cómoda butaca a Victoria, la cuál se sentó, y yo me senté frente a ella.
-¿Qué pasa Victoria? ¿Dónde está James?
-Está muerto, lo mató Edward.
-Lo siento. ¿Qué puedo hacer por ti?
-¿Puedes ir a ver si los Cullen están protegiendo a la humana?
-No me convence.
-Sólo será para hacer un reconocimiento. Vas, te fijas si están y vuelves, sólo te pido eso.
-¿Para qué exactamente?- Preguntó Irina.
-No quiero que se involucre más en lo que voy a hacer yo, sólo será un informe.
Irina iba a atacar a Victoria pero me interpuse entre ellas dos.
-Irina deja que se explique por favor.
-Él va a Forks, se fija si están los Cullen y luego vuelve para decirme lo que ha visto. No tiene que hacer más.
-Aún no me convence pero has de elegir tú amor mío.
-¿Si te hago este favor prometes no volver nunca más por aquí dejándome vivir mi vida?
-Por supuesto, te doy mi palabra de ladrona.
-Entonces voy a partir mañana a primera hora hacia Forks, quédate aquí hasta que vuelva.
-De acuerdo.
-Y antes de que te vayas he de confesarte algo. Relacionado con la pregunta que me hizo James sobre mi creador.
-Dime.
-Fue James quién lo mató, me parece que el mismo año que se quemó un manicomio.
-No sé que tiene que ver con esto que te pido.
-Sólo quería desahogarme con alguien que pasó mucho tiempo con él y le conociese mejor que yo.
-Entonces no te preocupes porque también mató a mi creadora.
Victoria se fue de la casa dejándonos allí sin más, me acerqué a Irina y le dije:
-Irina, cariño, si no vuelvo prométeme que la echarás de aquí a patadas.
Irina asintió con la cabeza. Me fui a pensar fuera, mientras daba un paseo. Victoria me conocía lo suficiente como para ver que no era muy feliz con la dieta que estaban acostumbradas las mujeres de esa casa y me dio la oportunidad de irme. Sabía que ocultaba datos y pensamientos, la verdad nunca me interesó lo que su cabeza maquinaba.
Me sentí mal por ella, porque sabía que James y ella estaban muy unidos no podía imaginar su dolor, sólo sentí que la había traicionado por no haberme quedado con ella.
Bueno… Este favor será una forma de redimirme de mis actos pasados. Así pues al día siguiente me dirigí hacia Forks para hacer el informe para Victoria.
Lo que no sabía era lo que tenía planeado Victoria, por lo que pude ver y saber estaba causando muchos estragos en la pequeña población de este pueblo. Mientras que no me molestase a mí mejor…
Fui a la casa de los Cullen y pude deducir que se habían ido hacía mucho tiempo, así pues habían dejado desprotegida a Bella. Estuve unas semanas por allí, para saber si volvían o no.
Mientras tanto me entretuve en andar por todo el bosque que había cerca de la casa de los Cullen, con lo que no había contado con unos lobos gigantes que rondaban por todo el bosque y… ¿Por la mañana? Que extraño.
Tuve que escapar de ellos en un par de ocasiones, no me dejaban ni alimentarme. Un día de los que creí que estaba a salvo me encontré con Bella en un claro del bosque.
Se asombró de encontrarme allí, no sé si en ese claro o vivo, me parece que ambas cosas sólo podía pensar en la sed que tenía y ella no me lo ponía muy fácil, estaba lo suficientemente cerca como para que me abalanzase sobre ella.
Le conté que me había mandado Victoria y que le tenía algo preparado, ella insistía en que los Cullen volverían a Forks.
No le pude decir mucho más porque los lobos se acercaron más al claro. ¡Maldita sean los lobos! Tuve que salir huyendo hacia dónde fuese mientras que fuese lejos de ellos.
Son muy rápidos los muy cabrones, me van a atrapar.
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